Horror violaron y asesinaron a una adolescente de 14 años y la arrojaron a un arroyo

Milagros Espinoza no regresó a su casa en la noche del martes. Hallaron el cuerpo ayer a la mañana. Hay tres detenidos que serían de La Matanza y se habrían instalado hace poco en el lugar.

Milagros Espinoza (14) vivía con su familia en el barrio Florida, de Monte Caseros, un lugar de humildes caseríos, situado en la prolongación de la calle Juan Pujol, que emergió sin planificación urbana alrededor del arroyo Mamangá.

Había llegado de La Matanza, provincia de Buenos Aires, hace más de 6 meses.

Sus padres, sin ocupación fija, se dedicaban al cultivo de verduras y hortalizas, y de trabajos ocasionales.

La adolescente, a quien la llamaban Mili, acostumbraba a juntarse con amigos. 

En la noche del martes 28, no regresó a su casa y la situación generó preocupación en el seno familiar. No era frecuente esa conducta. Pensaron que se había quedado en la casa de una amiga.

Pero ayer, alrededor de las 9, unos vecinos vieron el cuerpo de una chica al borde del arroyo Mamangá, salieron corriendo y avisaron a otras personas. 

Instantes después, el lugar quedó invadido de policías, entre ellos del Grupo Táctico Operacional (GTO), que se desplegaron en un amplio perímetro.

Había un ambiente convulsionado y una familia en shock.

Ataque a los agresores

Con el cuerpo todavía en el arroyo mientras se esperaba el médico forense y peritos, unos vecinos atacaron a quienes consideraron los asesinos y prendieron fuego a la precaria vivienda.

Por la facilidad de combustión de los materiales, madera y plástico, solamente quedaron restos humeantes.

Los policías detuvieron a tres muchachos y también hay un menor involucrado, que, por el momento, no está demorado, pero fue agredido por la turba.

Los restos de la chica fueron llevados al hospital de Paso de los Libres para la realización de la autopsia.

Provisoriamente, la causa está caratulada como abuso sexual gravemente ultrajante, doblemente agravado seguido de muerte.