Las hijas de Diego Armando Maradona solicitaron a la Justicia que ordene la detención de la exjueza Julieta Makintach, recientemente destituida por haber grabado de manera clandestina un documental sobre la muerte del ídolo mientras avanzaba el proceso penal. El planteo fue presentado por sus abogados, Fernando Burlando y Fabián Améndola, ante el Juzgado de Garantías que interviene en la causa.
En el escrito, los representantes de Dalma y Gianinna denunciaron que Makintach habría desplegado conductas graves que ponen en riesgo la investigación, entre ellas “hostigar testigos, manipular evidencia y ejercer intimidación”. Aseguraron que las acciones de la exmagistrada representan “riesgos procesales extremos” y comprometen los derechos de las víctimas.
Según los abogados, Makintach habría mantenido un patrón sostenido de hostigamiento hacia testigos clave. Entre los hechos señalados, mencionaron mensajes intimidatorios enviados a la policía Malen Tattí Romero luego de declarar, un intento de influir en la médica María Eva Soledad Pereyra, y un cruce con la periodista Bárbara Villar durante el Jury de enjuiciamiento, donde Makintach le habría dicho: “Me destrozaste”.
Los letrados remarcaron que “no se trata de actos aislados, sino de un comportamiento sistemático destinado a condicionar a quienes aportan prueba esencial”.
Además de la detención, el pedido incluye medidas alternativas en caso de que el Juzgado no avance con la privación de libertad:
- prohibición de salir del país,
- entrega del pasaporte,
- restricción de contacto con testigos, funcionarios, policías y periodistas,
- preservación del material audiovisual del programa de Nelson Castro donde la exjueza habló sobre el caso,
- y prohibición de realizar nuevas declaraciones públicas que puedan afectar la investigación o revictimizar a las hijas de Maradona.
Dalma y Gianinna afirmaron que Makintach “participó en un proyecto audiovisual clandestino” y que incluso después de ser apartada mantiene una actitud hostil y continúa opinando públicamente sobre el proceso, lo que consideran un riesgo para la causa.
Las respuestas tras el pedido
Luego del planteo, el abogado Rodolfo Baqué —impulsor del jury que terminó con la destitución de Makintach— rechazó la posibilidad de detenerla. Aseguró que la exfuncionaria “debe enfrentar el proceso en libertad” y que “tiene derecho a hablar donde quiera”.
También negó que el programa televisivo pueda incorporarse como evidencia, al señalar que “lo único válido es lo que diga en su indagatoria”. Baqué representa a Gisela Madrid, una de las imputadas por la muerte del exfutbolista.
La causa contra Makintach avanza en la UFI Nº1 de San Isidro, donde está imputada por cohecho pasivo, violación de los deberes de funcionario público, abuso de autoridad, malversación de caudales públicos y peculado de servicios.