Al menos seis delincuentes armados y encapuchados a bordo de tres vehículos interceptaron hoy una ambulancia del Servicio Penitenciario Bonaerense (SPB) y liberaron a los tiros a un preso que era trasladado desde un centro de detención a un hospital carcelario para una operación programada, en González Catán, partido de La Matanza, informaron fuentes policiales, judiciales y penitenciarias.
El rescate del recluso, que tiene antecedentes penales, ocurrió cerca de las 8.30 a la altura de las calles Enrique Clay y Jachal, de la zona oeste del conurbano, cuando era llevado en una ambulancia del SPB desde la Unidad de Detención 43 de La Matanza hasta el hospital del penal 22 de Lisandro Olmos, partido de La Plata donde tenía turno para una cirugía.
El preso ahora prófugo fue identificado por los investigadores como Daniel Horacio Quintana Quiñones (42), quien estaba detenido en el marco de dos causas penales
Lo que por ahora analizan los investigadores es la cercanía que se dio el rescate ya que fue en un radio muy cercano a la unidad de detención ubicada en calles Domingo Scarlatti y Jachal, a solo tres cuadras.
«Todo parecería que estaba programado y listo para el rescate», contó un jefe policial a Télam.
De acuerdo a la pesquisa, la unidad de traslado médico fue interceptada por tres vehículos, uno de ellos un Toyota Corolla blanco, otro auto color gris de la misma gama y un tercero oscuro, que se cruzaron frente a la ambulancia.
De los vehículos bajaron seis hombres con capuchas y armados con escopetas, quienes efectuaron disparos al aire y exigieron que descendieran los penitenciarios.
Los tres agentes del SPB bajaron tras arrojar sus armas al pavimento, tras lo cual el preso Quintana Quiñones fue subido a uno de los autos, en los que escapó con el resto de los delincuentes.
Los voceros del SPB dijeron que antes de huir la banda robó las tres pistolas calibre 9 milímetros provistas al personal por la fuerza.
«Escucho el primer tiro y veo que para la ambulancia que venía de la cárcel y dos autos se le pararon al frente para sacar al que llevaban. Lo bajaron y lo subieron a uno de los autos, la verdad que tenían todo planeado», afirmó al canal Todo Noticias una testigo y añadió: «Escucho el segundo tiro y una policía que iba en la ambulancia sale y dice que le robaron las armas».
La investigación se encuentra a cargo del fiscal Fernando Garate de la Unidad Funcional de Instrucción y de Juicio (UFIJ) 1 descentralizada de Gregorio de Laferrere, quien caratuló la causa como «evasión y robo agravado por el uso de arma de fuego, abuso de arma y portación ilegal de arma de guerra».
Según las fuentes, Quiñones purgaba una condena a siete años por una «tentativa de homicidio» que tramita en un juzgado nacional, mientras que espera otro juicio oral ante el Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) 1 de Mercedes por un «robo doblemente agravado por el uso de arma de fuego cuya aptitud para el disparo no pudo acreditarse y por su comisión en poblado y en banda, en concurso ideal con privación ilegal de la libertad».
Los pesquisas analizaron las cámaras de seguridad de la zona y también le tomaron testimonios a los guardias de traslados que fueron atacados.
«Las pruebas que se van sumando va sirviendo para avanzar en la causa. Lo que es raro en que el rescate se dio a tres cuadras de la Unidad Carcelaria 43. Fue un rescate programado y organizado por la banda delictiva», contó otro investigador cercano al caso.
Por otra parte, fuentes del SPB informaron a Télam que la institución realiza una investigación interna para ayudar a la justicia en la causa.
El fiscal Garate encomendó la búsqueda de la banda delictiva y del fugado al personal de la Dirección Departamental de Investigaciones (DDI) de La Matanza con la colaboración de la fuerza carcelaria y de varios comisarías de ese distrito.